Israelíes marchan en Jerusalén para exigir la liberación de los rehenes
El gobierno de Netanyahu se unieron a los familiares de los 134 secuestrados que siguen retenidos en Gaza por el grupo terrorista Hamas

Unas 100.000 personas, según los organizadores, se congregaron este domingo en Jerusalén para protestar contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y pedir la celebración de elecciones anticipadas ante su gestión de la guerra en la Franja de Gaza, que se acerca a los seis meses.
Por primera vez, a las protestas antigubernamentales se unieron además familiares de los rehenes secuestrados por Hamas en la Franja de Gaza, que reclamaron además un acuerdo que facilite la liberación de los 130 cautivos que aún permanecen en el enclave.
Se trata de la protesta más multitudinaria en Israel desde que comenzó la guerra, con 100.000 asistentes, según las estimaciones de los organizadores.
“Si no puede traerlos de vuelta, dé un paso al lado, váyase. Necesitamos a alguien en su lugar que sí pueda hacerlo”, afirmó durante la protesta la hija de Hanna Katzir, una de las rehenes liberadas durante la tregua de siete días acordada entre Israel y Hamás el pasado noviembre.
El primer ministro, en declaraciones a los medios al mismo tiempo que tenía lugar la marcha, aseguró que convocar elecciones anticipadas solo serviría para paralizar las negociaciones para liberar a los secuestrados. “El primero en agradecerlo sería Hamas”, indicó.
El primer ministro se enfrentará este domingo a una operación por una hernia que le fue descubierta el sábado, pero aseguró que volverá a estar en acción muy pronto.
Mientras, en la Franja de Gaza, alrededor de una decena de periodistas resultaron heridos en un bombardeo israelí sobre el patio del Hospital Mártires de al Aqsa en la ciudad de Deir al Balah, el más importante del área central de Gaza, en el que además murieron dos personas, según una fuente del Ministerio de Sanidad gazatí.
Las autoridades de Hamás anunciaron que el número de periodistas que ha muerto en Gaza desde el comienzo de la guerra ascendió hoy a 137, después de que un fotoperiodista que trabajaba para varios medios falleciera cuando bombardearon su casa en el campamento de refugiados de al Maghazi, cerca de Deir al Balah.
Cerca de 32.800 personas ha muerto desde el inicio de la guerra, más del 70 % de ellas mujeres y niños, y una treintena de niños ha muerto por desnutrición aguda ante la hambruna inminente que acecha en el enclave, según datos del Ministerio de Sanidad gazatí.