Gobierno presenta resultados en la lucha contra el comercio ilícito y la competencia desleal

La Dirección General de Aduanas (DGA) presentó ayer los avances y resultados de las acciones implementadas para combatir el comercio ilícito y la competencia desleal en la República Dominicana, especialmente relacionados con el comercio asiático.
Los datos fueron dados a conocer durante la reunión de la Mesa Contra la Competencia Desleal y el Comercio Ilícito, presidida por el ministro de Hacienda y Economía, Magín Díaz, y el director de Aduanas, Yayo Sanz Lovatón. El encuentro también contó con la participación del vicealmirante Luis Rafael Lee Ballester, director general de Migración; Víctor Benavides, director ejecutivo de Pro Competencia; Peter Prazmowski, director del Consejo Nacional de Competitividad; y Eddy Arango, subdirector de Fiscalización de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII).
A la reunión se sumaron representantes del sector privado, entre ellos la Organización de Empresas Comerciales (ONEC), encabezada por su presidente Ernesto Martínez, y la Asociación Dominicana de Importadores Ferreteros, representada por Antonio Papaterra.

Durante la presentación, Rainiero Olivo Bordas, representante de la DGA, destacó que en los últimos cinco años la institución ha realizado 196 fiscalizaciones posteriores al despacho, casi el triple de las efectuadas en gestiones anteriores. Estas acciones han generado RD$9,727 millones entre impuestos determinados y sanciones.
Olivo también informó que desde 2023 a la fecha se han identificado más de 16,000 contenedores con alto riesgo de subvaluación, los cuales fueron revalorados antes de su despacho. Este proceso permitió determinar RD$5,488 millones adicionales en impuestos.
En total, los procesos de fiscalización de la DGA han tenido un impacto superior a RD$15,215 millones en impuestos y multas dirigidos a frenar la competencia desleal en este sector.
Entre las medidas innovadoras implementadas por la institución se incluyen la medición del riesgo valor durante el despacho, el uso de rayos X y bodycams, la creación de mesas de trabajo con otras aduanas internacionales para compartir mejores prácticas, fiscalizaciones conjuntas con la DGII y la clausura de empresas vinculadas a prácticas ilícitas.




